(Me hace feliz)
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Me hace feliz pensar que el otoño está cerca y que los hayedos volverán a colorear como los niños -caprichosamente- sus hojas, dejándolas caer poco a poco como monedas sin peso mecidas por el viento, dándose un paseo por el aire antes de llegar al suelo. Tras tan largo y caluroso verano, me hace feliz despertar antes de las siete y ver que no ha amanecido, que ni cantan ni gorjean los pájaros, aunque por ser sábado, hoy pasan esas veloces cucarachas que llamamos coches por la avenida. Se nos acerca un otoño caliente de acontecimientos políticos, y para huir de eso, me hace feliz pensar que pronto podré pasear por el precioso hayedo volcánico de esta preciosa y amada provincia, olvidándome de todo.
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Me divierte y me alegra el verano, pero mi estación favorita es, sin duda, el otoño, porque viste el paisaje con tonalidasdes rosas, ocres y oros y es una verdadera inspiración para pintores y poetas.
ResponderEliminarUn abrazo
Tienes mucha fortuna, solo falta esperar para disfrutar de esos lugares y momentos.
ResponderEliminarSaludos
Cada estación tiene sus pros y contras, querida amiga Julia. La ventaja del verano es que el día es más largo y en caso de viajes dan más de sí las horas de luz. La primavera por menos calor y la explosión de flores. El otoño es ideal para pasear por los bosques, los parques, la montaña... y el invierno por representar más recogimiento familiar, y al no salir tanto, tenemos más tiempo para escribir.
ResponderEliminarGracias por pasear por aquí. ¡Feliz fin de domingo y buena entrada de la nueva semana!