martes, 24 de enero de 2012

VÍCTIMA DE MIS ERRORES *
Confundí tu corazón con una nube
en la que quise ocultar las tristezas cotidianas
que aprisionan mi vida.
Pero al acercarme a él,
se me rompió el mío en mil pedazos
y están ahora clavados en mis versos.
Por eso nombran el dolor y piden cuenta
a la vida traicionera que ha nombrado su estandarte.
Por eso saben más de desamor que de otra cosa,
y duelen tanto,
que enturbian mi razón y mis palabras.
Estuve sano y tú me amaste,
me amaste por las esquinas de las horas que perdimos,
empeñados como niños en querernos,
y en buscarnos entre dudas y silencios.
Tú, en mí, la fortaleza que no tuve.
Yo en tí, ni la perfección ni la belleza,
sino la bondad hecha mujer, que ya es bastante.
Pero confundí tu corazón con la lluvia
que derramada sobre mí,
purificara para siempre mis sentidos.
Ahora víctima soy de mis errores.
Y, entre todos, perder la salud somo si fuera una moneda
con la que pagar tu amor y tu respeto.
Víctima fui de mi ceguera
porque busqué tu corazón por todas partes
hasta que comprendí que no tenías.
*
MANUEL HEDRERA CAMACHO
Chiclana-Cádiz

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