DE LA REVISTA "PROVINCIA"
A
ARMANDO AZCURRA
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Vino arriando sueños, vaya a saber desde cuando, pero me pareció que últimamente lo hacía con cierta nostalgia, tal vez presintiendo que eran ya los arreos postreros en su hilvanar poemas y presencias.
Era un criollista, al que podría llamarse con toda propiedad ciollista, por antonomasia.
Escribía versos espontáneos porque le salían "COMO OVEJAS DEL CORRAL", aunque trataba que no se estorben. Versos que a lo mejor les faltaba algún retoque o necesitaban una corrección, que de buen grado aceptaba y aplicaba.
Era un decidor que vino arriando sueños vaya a saber desde cuando, mas, espezó a escribirlos con esa naturalidad que no necesitaba del recurso leído, sino del recurso interior, que se mostraba presto a escuchar y a trasladar, por así decirlo, al papel.
Llegaba a mi casa a pagar el ejemplar de PROVINCIA recibido en la suya de la ciudad de RIO CUARTO, o, a buscar un posible ejemplar que no le había llegado.
DON ARMANDO AZCURRA había andado caminos de los más diversos por su trabajo. Había nacido en LA PAZ, en nuestra zona, EL 15 DE MARZO DE 1937 y falleció repentinamente en LOS ROMEROS, a 25 kms. de VILLA DOLORES, dónde tenía techo y patio de recreo, en naturaleza buscada y amada como bien se ama la tiera... EL 7 DE ABRIL DE 2.004.
Llegaba a mi casa a leer versos o prosas, a conversar con fluidez y gusto, a interesarse en poemas, libros y noticias, y esos ratos vividos en el diálogo tienen el valor y el precio de las evocaciones de difícil tasación: "porque no es como aparenta /sino como yo lo siento."
Tal vez aquel día en LOS ROMEROS el azulejo legüero escarciaba de otro modo y una nube celeste envolvió su criollismo natal para llevárselo a una distancia inconmensurable. Más tarde avisó su dolorida esposa.
Para él no debió ser extraño lo repentino porque de tanto arriar sueños estaba nomás en el vuelo, aunque su vuelo duela ahora como esas heridas que uno trata de no saber, aunque estén ahí, para recordar que la familia, la amistad, el afecto, el amor y el mensaje telúrico un día cualquiera tienen su cielo, y es la esperanza que no queda cuando el silencio nos alcanza.
Su decir quedó en estos como en otros versos:
"POR TODOS LOS EMPUJONES,
LA VIDA, EN SU EXIGENCIA
NOS DIO UN RANCHO DE QUERENCIA
Y DOLORES BAJO EL CUERO,
LOS HUESOS COMO EL PAMPERO
HACEN CRUJIR MI ARMAZÓN
Y MI POBRE CORAZÓN
YA ESTÁ QUERIENDO AFLOJAR,
SI DIOS ME LLEGA A LLAMAR
VOY CONFORME, Y CON RAZÓN."
ARMANDO AZCURRA.
CONSUELO GAUCHO
Soy un gaucho de este suelo
de esta mi patria Argentina
con mi forma tan genuina
caballo, rancho y mujer,
la juerga de mi querer
son 3 hijos que mi a dau,
esto lo dejo marcau
pal sol de mi atardecer.
Y allá al final del camino
donde termina mi vida
está mi parte cumplida
pal dia que yo me muera,
cuando se abra la tranquera
que la a la última querencia
tal vez no noten mi ausencia
si me pierdo campo ajuera.
Pues yo sé que donde quiera
quedo bien representau
en los retoños qui a dau
el árbol de mi existencia,
y porque obré con prudencia
dos hembritas y un machito,
con el corazón bendito
ya perderán su inocencia.
Pa que siga el apellido,
que no se pierda mi nombre,
que lo recuerden al hombre
recordando el paisanaje,
cuando en el último viajes
en rumbo hacia el olvido,
en todo el pago querido
estará de luto el vacaje.
Partiré sin amargura
como un gaucho verdadero,
cabalgando en el pampero
me perderé en la llanura,
o el verde de la espesura
en el corazón del monte,
porque encontré en mi horizonte
lugar pa mi sepultura.
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ARMANDO AZCURRA
ARGENTINA
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