Yo no he tenido la suerte de poder verlos al natural. Pero hace muchos años, cuando aquí apenas se les conocía, un final de curso en el colegio de mis hijos, los más descarados -especialmente el que hacía de narrador- los imitaron con el MASTROPIERO, y fue fabuloso. Desde entonces, cuando se hablaba de ellos o cuando salían por la tele, siempre estuve pendiente. Y no digamos cuando comenzaron a aparecer por youtube... Gracias Ester por tu comentario. Tenemos muchas cosas en común. Besitos.
Jugando con el equívoco o inventando instrumentos, son geniales. Tal vez de ahí sacaron el nombre con que se identifican. Tienen -como todos los humoristas- números más logrados que otros, pero son geniales, sí, Francisco. Lästima que falte uno, que debe de estar haciendo reír a San Pedro.
Me encantan desde siempre, y cuando puedo ir a verlos no me lo pienso, Un abrazo preciosa
ResponderEliminarUna genialidad jugando con el equívoco.
ResponderEliminarYo no he tenido la suerte de poder verlos al natural. Pero hace muchos años, cuando aquí apenas se les conocía, un final de curso en el colegio de mis hijos, los más descarados -especialmente el que hacía de narrador- los imitaron con el MASTROPIERO, y fue fabuloso. Desde entonces, cuando se hablaba de ellos o cuando salían por la tele, siempre estuve pendiente. Y no digamos cuando comenzaron a aparecer por youtube... Gracias Ester por tu comentario. Tenemos muchas cosas en común. Besitos.
ResponderEliminarJugando con el equívoco o inventando instrumentos, son geniales. Tal vez de ahí sacaron el nombre con que se identifican. Tienen -como todos los humoristas- números más logrados que otros, pero son geniales, sí, Francisco. Lästima que falte uno, que debe de estar haciendo reír a San Pedro.
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