martes, 31 de marzo de 2009




*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*

EL ENIGMA DEL CHISTE

*

No por contar más chistes nos convertiremos en una persona con sentido del humor.

El chiste está ahí, circula con el boca a boca y, de alguna manera, no es algo original.

Sigue siempre el mismo patrón; sugiere un planteamiento y luego tiene un giro inesperado.

Mucho de su efecto está cómo se cuenta. Pero es algo arriesgado, porque despierta expectativas y si la gente no se ríe... entonces se mete la pata.

"Por ello es preciso ensayarlo, como una pieza musical, delante del espejo, de los amigos", aconseja Jáuregui.

Según Germán Payo " las anécdotas personales son mejores que los chistes: son más originales, y su efecto sorpresa es mayor. En este sentido, es más útil ensayar contar historias y vivencias, que alguien ha vivido, o que le han contado con gracia, más que reproducir un chiste convencional".

Sin embago, puede ocurrir que una anécdota nos parezca divertida, pero que a quién nos escucha no le haga ninguna gracia. Y eso porque los chistes están vinculados a la cultura de la que proceden.

Según Damián y Jáuregui, "los chistes están en el corazón del sistema de símbolos y pensamientos de una sociedad".

En efecto, las emociones son idénticas en todo el mundo, pero es distinta la manera de interpretar la realidad que provoca el desencadenamiento de la risa.

Puede variar de un momento a otro y de una persona a otra.

Y mucho más de una cultura a otra.

La misma máscara que aterroriza a un niño pequeño puede parecerle divertida a un adulto.

"Lo que considera gracioso está vinculado a la sociedad a la que uno pertenece. Si nos reímos, es porque percibimos que el actor social protagonista de la broma ha incumplido el papel que se le había asignado dentro del teatro de la vida cotidiana", concluyen.
*

Este artículo, cuyo autor no he encontrado por ninguna parte, es de una revista semanal de prensa.

Pero como lo encuentro bastante acertado, lo incluyo aquí, para que todo visitante de este blog, comprenda porqué he titulado "JARABE DE HUMOR" este espacio.

Es nada más y nada menos, para que cada cuál se dosifique su propia medicina cuando estime oportuno. Y porque para mí, EL HUMOR ES UN VERDADERO JARABE.

*

No hay comentarios:

Publicar un comentario